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lunes, 5 de diciembre de 2011

Distancia

Duele,... cómo duele pensar que el hilo de su voz se va perdiendo cada vez en la costura de mis oidos...
Qué evidente es la distancia que nos separa, en espacio y en la bocanada de aire impenetrable entre su camino y el mío, entre su nube y la mia, entre nuestros ojos...
Leve es el susurro de su respiración en mi oído cuando nos abrazamos,
limpio es el sonido del silencio cuando callamos para oir nuestros sentimientos,
suave las caricias de sus palabras,
lento el tiempo que pasa cada día en el regazo de la espera.

Tanto lo que hemos compartido, .....

Inevitable el dolor del alma en la distancia.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Satén


Aquella cortina invitaba a entrar; el viento se alió contigo para atraerme hasta allí con pasos firmes que laurearon el triunfo de tu provocación.

Aguardabas impaciente, y me recibiste acercándote con cautela pero con descaro, con la misma insolencia que cautivó mis sentidos y cegó mi censura horas antes...
satén en tus labios, la sensualidad de los detalles descuidados que inocentes abrieron miles de puertas en mi aquella noche.

Tus dedos se convirtieron en cuerdas que tocaban las melodías mas dulces, y que se podían rasguear sacando de ellos suaves notas iluminadas de neón;
tu sonrisa, eterna y pícara siempre acompañando nuestras acompasadas letras;
tu mirada fija en mi mirada mientras tu mente bordaba los más perversos dibujos y desentrañaba deseos recónditos desde lo más profundo, bailando en mi cuerpo sin pudor.

Tu cuerpo adornaba la sombra,
suave y firme,
indecentemente perfecto.

Limpias y cándidas palabras que rellenaban los huecos del silencio, y que adormecían mi cuerpo tenso con la tibieza de una caricia,
tus huellas, las que dejaste en mi cuerpo y en mi mente y que durante horas te dedicaste a grabar con la constancia lenta, sutil y sedosa de quien conoce el lugar donde posar su alma.

Satén que ha dulcificado mi ansia con la única arma de un roce
suave brisa joven que has perfumado mi mente...

miércoles, 26 de octubre de 2011

Desgranar estrellas



Desde cuándo... esta sensación templada y lívida.
De deseo sin desesperación.
De sosiego y calma pero sin tregua.
Es raro, pero mantengo la velocidad constante; eso me tranquiliza.
La quemazón dolorosa de ayer ha dejado paso a una calma extraña,
y empiezo a desgranar por dentro las estrellas que le he robado al universo,
las miro, las escojo, y una a una les doy forma,
juego con ellas y les arrimo calor
para que viertan en mis manos su elixir de luz, esa que tanta falta me hace.

....shhhh....
....silencio.... si guardas silencio oiremos su tintineo...

viernes, 23 de septiembre de 2011

el oasis


Otra vez el misterio ha vuelto a aparecer, ....
ese halo que puede confundir lo que sientes, pero no lo que quieres.
Quieres renovar el sentir, imaginar, rozar, seducir...

Una gota de agua fresca vuelve a mojar tus resecos labios, ahora que te habías acostumbrado a la aridez de los sentidos, de la sensatez. Acaba de caer, desde no sabes de donde, pero sabe dulce, y sientes que vuelve a iluminar tu habitacion gris.

Has arriesgado a atar bien lo vivido con cuerdas de ternura sin dejar que se rompan,
y has decidido seguir caminando en el desierto en busca de un oasis.

Alma inquieta e insaciable,
Quedan tantas miles de ideas que fabricar sobre letras dormidas, ahora que la vida se ha encargado de desenvolver la esencia oculta, de quitar la virginidad a los tintes rosados que tornaron tu vida del revés.

Lento es el tiempo en el regazo de la espera,
inevitable el dolor del alma en la distancia entre tí y la realidad.

Te levantas y te hundes, abres las alas y te limitas, te escondes y te abres.
Todo a la vez en un maremagnum de ideas, sensaciones y momentos que hacen de cada día un nuevo capítulo de esta extraña historia.

lunes, 12 de septiembre de 2011

despertar

Por fin acabó el verano. Por fin de nuevo, con destino al lugar donde vuelve a resonar el eco de mi vida vacía.
Por fin se han acabado los momentos de soledad ínfima, de extrañas añoranzas.

Voy en un tren, de nuevo, sin saber siquiera por qué realmente, sin haber planificado nada, (porque he descubierto lo que puede cambiar el rumbo de toda una vida en pocas horas)  y con la resignación comprensiva de quienes son realmente parte de mí, que me observan salir cada día con el puñal clavado en mi costado, aquel que disimulo si realmente quiero que mi vida resurja.

Me encantaria poder volver a escribir versos maravillosos, palabras sonoras y rimas profundas, como he hecho en otras ocasiones en lineas más arriba, pero la anestesia que he puesto a mis sentimientos para que nada duela no me deja.

Espero de nuevo la inspiración y las ilusiones que inunden otra vez este alma hueca que tanto ha dado, exprimida ya, y que espera para llenarse de nuevas oportunidades,
para volver de nuevo a sentir miradas de kilómetros adentro,
para oir claramente respirar a quien dista de mí diez metros,
para aspirar ese aroma... el olor que trae el aire que levanta sus movimientos y que me penetra los sentidos.

Abro una ventana, a ver qué ocurre...

viernes, 26 de agosto de 2011

Amanece tan lentamente....


mi paciencia se derrite,

que me espere mi sol, que ya voy.

Lentamente amanece,

... y yo aún despierta.

viernes, 19 de agosto de 2011

Pólvora mojada

Tengo mi corazón helado, a veces le doy candela y se me apaga y vuelve a acurrucarse en el lecho de la paciencia, de la espera inquieta y dudosa. A pesar de ello no hago nada por sacarlo de ahí, y lo dejo descansar, hibernar y recuperarse de tanto alboroto y de dar de sí lo máximo que ha podido.
Después de meses de encantos, miedos, inquietudes, esperanzas, éxtasis, penas, desesperacion y rabias, hoy ya no puedo forzarlo más.
Saber que aún queda un arduo trabajo por delante de nuevo, sin conocer los caminos, me hace pensar en que necesitaba este receso. Serán caminos probablemente tortuosos y empedrados, en donde confío que hayan pequeños oasis sonde poder descansar y soñar de nuevo, para poder seguir luego.
Pero eso será después....
Y tengo miedo de emprender el camino, porque siento que he perdido mis armas. Ya no me queda aquello que me aseguraba el éxito en lo que me empeñaba en alcanzar, y me he quedado desnuda, temerosa, escondiendo lo que, ciega, en otro tiempo me atrevía a mostrar sin pudor.
Me escondo de mi misma, no tengo poder , ni nada que me de alas para conseguir mis metas.
Hoy la pólvora está mojada pero mis manos están abiertas,
con guantes blancos que cubren su desnudez, pero abiertas.
Ahora ya no puedo luchar, saco mi bandera blanca y pierdo esta batalla.